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Social Viernes 05 de Enero de 2024 | Publicado a las 07:34 | Actualizado a las 07:34

Cerca del 10% de los grifos de la ciudad son destruidos anualmente en Valdivia

Publicado por: Gerardo Pavez
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Llaman a cuidar estos elementos | Aguas Décima

En verano aumentan los problemas ocasionados por la alteración de estos dispositivos. Es por esto que se lanzó una campaña para concientizar a la comunidad.

La pérdida de presión en barrios enteros, rotura de tuberías, turbiedad en el agua y hasta cortes de suministros, son algunos de los problemas que acarrea la apertura ilegal de grifos en Valdivia, según denunció la empresa sanitaria Aguas Décima que inició  una campaña en redes sociales para generar conciencia sobre la necesidad de cuidar estos dispositivos existentes en la ciudad, que son claves a la hora de combatir incendios.

“Un grifo es un dispositivo especializado, operado por profesionales capacitados y con instrumentos muy específicos que poseen sólo las sanitarias y Bomberos. Su función es suministrar agua a los carros bomba para que éstos a su vez administren la presión de salida según el tipo de siniestro que abordan. Por tanto, cualquier alteración al grifo pone en riesgo el sistema coordinado de emergencias”, explicó Verónica Solís, jefa del área de atención clientes de Aguas Décima.

Agregó que en la actualidad Valdivia cuenta con 1.074 grifos operativos en su red, con una tasa de reposición por daño y destrucción del orden del 8 al 10% anual.

Solís puntualizó que “el mayor daño por manipulación indebida de grifos lo sufre nuestra ciudad en verano, y se traduce en la perdida de presión en los hogares de sectores cercanos, y el aumento de emergencias por rotura de tuberías, lo que a su vez puede implicar desde fenómenos puntuales como turbiedad en el agua, hasta el corte del servicio en barrios y poblaciones completas”.

De ahí que desde Aguas Décima reiteraron el llamado a cuidar los grifos, y a la vez a denunciar a través de Carabineros o Seguridad Municipal a quienes hagan mal uso de los dispositivos.

El artículo 459 del Código Penal castiga con presidio menor en su grado mínimo a medio y multas de 20 a 25 mil unidades tributarias mensuales, a quienes saquen aguas de grifo sin estar autorizados. El mismo rango de sanción aplica para quienes destruyen y/o alteran este tipo de dispositivos.

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