Conectividad hacia la Costa de Valdivia

Luego de mucho tiempo nuestra ciudad de Valdivia comenzó, hace tan solo unos años atrás, una planificación acotada para elevar las condiciones de conectividad hacia la costa de Valdivia, en particular hacia sectores poblados como Niebla, Curiñanco y Corral, principalmente.

Esta planificación de obras públicas nace principalmente por solicitud concreta de los habitantes de la costa, que en forma práctica y acotada define las prioridades, las cuales comienzan desde la remoción del Cerro Las Canteras en el acceso a Niebla el año 2013, provocando una interrupción de la Ruta T 350, y poniendo de manifiesto la fragilidad del territorio.

Junto con una solución práctica y urgente en la estabilización del talud, se planifica la pavimentación de la ruta Loncoyén – Curiñanco, extrañamente postergada por administraciones anteriores, el diseño de pavimentación Ruta Torobayo –Curiñanco, el muy comentado proyecto de conectividad Las Mulatas – Torobayo – Cutipay, puente y doble vía, en su fase de prefactibilidad, y la conservación urgente de la ruta, que ya no logra contener la exigencia del tráfico y el desgaste propio de una ruta construida con estándares básicos.

A lo anterior se suma la construcción del muelle de pasajeros de Niebla, el dragado del río Valdivia, la implementación de la barcaza Andalué y el término del diseño de la soñada ruta Valdivia – Corral, cuyo esfuerzo en iniciar el asfalto hasta el sector de Futa, constituye un símbolo de acercar la comuna de Corral y prospectar definitivamente un Puerto para la Región.

Luego de cuatro años de iniciar esta planificación resulta fundamental apelar a la continuidad de las obras públicas, la costa de Valdivia ya no puede esperar, es hora de reconocer a este sector de Valdivia como la puerta de entrada desde el Pacífico, cada vez más visitado por turistas, que quieren conocer nuestros fuertes de Corral, de Niebla, a la selva valdiviana, y disfrutar de nuestro turismo rural y ferias típicas, en definitiva conocer nuestra historia.

Dilatar proyectos que ya se encuentran con fases concluidas, incluso con inversión aprobada para iniciar obras, en definitiva lo que logran es postergar el desarrollo competitivo de una Región rezagada.