Cristián Labbé es condenado por aplicación de tormentos a prisionero en Panguipulli en Dictadura
El exalcalde de Providencia y coronel de Ejército en retiro, Cristián Labbé fue condenado por el delito de aplicación de tormentos a Harry Cohen, quien fue torturado en la zona de Panguipulli, durante la Dictadura Cívico Militar.
El ministro en visita extraordinaria para causas por violaciones a los Derechos Humanos de la Corte de Apelaciones de Temuco, Valdivia, Puerto Montt y Coyhaique, Álvaro Mesa, condenó al coronel de Ejército en retiro Cristián Labbé Galilea, como autor del delito de aplicación de tormentos de Harry Edwards Cohen Vera. Ilícito perpetrado en noviembre de 1973 en la ciudad de Panguipulli, Región de Los Ríos, se informó desde el Poder Judicial.
De acuerdo a lo que quedó establecido en la investigación, Cohen fue detenido por “boinas negras” en Futrono y trasladado hasta un centro de detención en Panguipulli en un helicóptero, junto a otra persona y mientras pasaban por el Lago Riñihue fueron amenazados por los militares de ser lanzados al agua.
Asimismo, se explica en el fallo que ya en el recinto de Panguipulli “un “enorme militar”, teniente de la época de nombre Cristián Labbé Galilea, fuertemente armado y con ropa de camuflaje quien bajo improperios le ordena que bajara su vista, al mismo instante en que lo amenaza, con una arma blanca (corvo), que le cortaría el cuello. Que en forma posterior y por el carcelero del lugar se entera de la identidad de este oficial, quien le señala el apellido y le manifiesta que ‘era hijo de un connotado militar’”.
En ese sentido, se detalla que unos dos días después de dicho episodio, “la víctima fue retirado de su celda con los ojos vendados y con un saco a modo de capucha sobre la cabeza, amarrado de pies y manos, siendo transportado en un camión hacia un lugar que aparentemente pudiera corresponder a una bodega. Que en estas circunstancias fue colgado con las manos atadas a la espalda, permitiéndole apoyarse sólo con la punta de sus dedos al suelo. Que en ese momento es interrogado por 3 militares, respecto de los cuales pudo identificar la voz de aquel oficial corpulento descrito en el punto precedente, quien en forma burlesca realizaba reiterados alcances a su origen semita. Que en dicho interrogatorio conectaron electrodos en su tobillo y muñecas, los cuales en forma sistemática producían descargas eléctricas cada vez más intensas, al mismo tiempo en que era interrogado”.
En el fallo, el Ministro Mesa condenó al exoficial del Ejército a la pena efectiva de tres años y a las accesorias legales correspondientes a la suspensión de cargo u oficio público durante el tiempo de la condena.
Además, el magistrado condenó al Fisco de Chile a pagar una indemnización de treinta millones de pesos a la víctima, Harry Cohen, por concepto de daño moral debido a los apremios ilegítimos sufridos en su persona.