De “obra Bicentenario” a “vergüenza internacional”: La historia del Cau Cau a punto de su reparación final
Desde los primeros intentos por crear una estructura en la zona en 1991, la licitación fallida en octubre de 2005, pasando por el falso topógrafo y la instalación errónea de sus brazos, el camino hacia su construcción se vio marcado por obstáculos.
El Puente Cau Cau, una vez concebido como la solución para aliviar la congestión entre el centro de Valdivia, el sector Isla Teja y la costa de la capital regional, ha tenido una historia plagada de escándalos y problemas estructurales. Desde sus intentos iniciales en la década de 1990 hasta los últimos episodios, cada etapa de este proyecto ha estado marcada por una serie constante de desafíos y errores críticos, que lo han llevado a la fama internacionalmente como sinónimo de desastre.
La idea del puente se concibió inicialmente en 1991 en la municipalidad de Valdivia, diez años después comenzó a tomar fuerza y en 2005, por fin se licitó , pero no se logró concretar.
En 2010, el MOP confirmó los fondos para el proyecto como parte de una serie de iniciativas emblemáticas, en el marco del Bicentenario de la Independencia.
El año 2011 marcó la adjudicación a la empresa española Azvi por 31 millones de dólares. En ese momento, la empresa andaluza era vista como una buena elección ya que contaba con la experiencia de haber construido proyectos como el aeropuerto de Chacalluta, el puerto terrestre de Los Andes, la zona de extensión de apoyo logístico del puerto de Valparaíso y estacionamientos en Santiago y Temuco.
El primer gran escándalo vino en noviembre de 2013 cuando se descubrió a un falso topógrafo que trabajaba en la obra. El hombre había presentado documentación falsa para obtener el empleo, portando un título universitario falso de ingeniero en geomensura de la Universidad Tecnológica Metropolitana, cuando solo tenía hasta sexto básico cumplido.
Los problemas técnicos no tardaron en aparecer. En enero de 2014, se confirmó que los brazos basculantes fueron instalados erróneamente, provocando el retraso de la marcha blanca prevista. Luego, en febrero de 2015, se descubrieron fallas en las rótulas instaladas en el puente, lo que llevó a la suspensión de Azvi en el registro de contratistas del MOP. Más adelante, en junio de 2015, un informe técnico independiente confirmó problemas hidráulicos críticos, culminando en la terminación del contrato con Azvi por parte del MOP.
El escándalo se transformó en internacional, cuando en octubre de 2015 el canal Discovery Channel emitió un capítulo dedicado a la estructura en su show “Horrores de Cálculo” un programa sobre errores de ingeniería.
En abril de 2016, un informe recomendó la demolición y reconstrucción del puente, extendiendo su cronograma hasta 2018.
En medio de litigios judiciales, la responsabilidad se disputó, culminando en septiembre de 2019 con la exoneración de Azvi y la imputación de responsabilidad al Ministerio de Obras Públicas chileno.
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En agosto de este año, el fallo fue apelado por el Consejo de Defensa del Estado, y la Novena Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago acogió el recurso de apelación fiscal, resolviendo que el MOP estaba habilitado para culminar anticipadamente el contrato sostenido con la empresa a cargo de la construcción del puente Cau Cau.
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El proceso de reparación definitiva del puente comenzó en diciembre de 2021 cuando la constructora Fe Grande S.A. se adjudico por $12 mil millones el proyecto.
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