Gripe aviar impacta al Santuario Carlos Anwandter: Un centenar de cisnes son incinerados
Un centenar de cisnes de cuello negro han sido incinerados para frenar el avance de la influenza aviar en el Santuario de la Naturaleza Carlos Anwandter. Los esfuerzos están enfocados en evitar la propagación a otras zonas de la región, proyectándose un trabajo aproximado de tres años para superar la emergencia.
Con urgencia se desarrollan las labores de pesquisa del patógeno en el espacio protegido, que además de los cisnes de cuello negro se practica en otras aves como gallinas, pavos, patos, torcazas y otras. El virus solo ha impactado en la población de los icónicos ejemplares del santuario, que como medida de control son incinerados en instalaciones de la Universidad Austral de Chile.
Todos han sido encontradas con signología asociada a la gripe aviar en el perímetro de dos kilómetros a la redonda establecido en el espacio natural y el director regional subrogante del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) en Los Ríos, Daniel Escobar, confirmó que “hemos retirado 106 cisnes del santuario hasta el día de ayer”, agregando que “la estrategia es una vez que se detecta una especie positiva en el área del foco, todas las aves que tengan signología nerviosa de esa especie ya no se muestrean más y se presumen infectadas”.
Además, Escobar explicó que “estamos asumiendo que tenemos casos positivos todos los días, por lo tanto al igual que la emergencia que está en otras regiones, va a ser un trabajo de largo aliento, que por lo menos en las otras regiones llevan más de cuatro meses trabajando en este tema, así que lo proyectamos por lo menos para estar en una situación de tranquilidad durante los próximos tres años nosotros como servicio, a nivel de búsqueda activa del virus”, lo que dependerá del ritmo de circulación y número de especies contagiadas.
Para la seguridad de los pequeños productores, el SEREMI de Agricultura, Patricio Barría, subrayó la existencia del seguro Expocarne, el que con una resolución del SAG permite asumir los costos en caso de eutanasia a aves utilizadas para producción.
“Eso está en función de promover que las personas hagan las denuncias o que hagan las alertas de que apareció un ave en su patio que falleció, para que el SAG vaya a ver si es influenza aviar o no, porque o si no las personas van a tender a no hacer la denuncia, entonces con esto aseguramos de que las personas hagan la denuncia”, dijo Barría, llamando a que los ejemplares sean dispuestos en espacios cerrados, para evitar contacto con aves de otros planteles.
Aunque la situación actual reviste preocupación, la SEREMI de Salud, Cristina Ojeda, dijo que es importante que la ciudadanía esté tranquila. Sin embargo, puso énfasis en que “si bien hay una baja probabilidad de contagio de aves a humanos, siempre existe una pequeña probabilidad y eso es lo que tenemos que evitar, así que solamente señalar que en el caso de ver esta sintomatología en aves, aves muertas o incluso las deposiciones de aves, por favor no tomarlas, no acercarse y hacer el llamado al número de teléfono del SAG”.
Se espera que esta semana se conozcan resultados de exámenes de un criadero de gallinas en el sector de Pelchuqín, además de aves de traspatio cercanas al foco en el Santuario de la Naturaleza.
