¿Irresponsabilidad o reactivación necesaria?: Opiniones divididas genera reapertura de locales en Valdivia
Tras el anuncio de las medidas de desconfinamiento gradual que se aplicarán en Los Ríos, restaurantes y cafés de la zona se han estado preparando para la tan anhelada reapertura. Sin embargo, también están los locales que han decidido mantener cerradas su puertas por considerar que la reapertura es una medida demasiado apresurada.
Entre las cinco medidas de confinamiento que se levantarán de forma gradual en la región de Los Ríos desde el lunes 13 de julio, se encuentra la posibilidad de que cines y teatros puedan operar hasta el 25% máximo de su capacidad, así como también restaurantes y cafés.
La medida no ha estado exenta de polémica, pues hay quienes consideran que se trata de un mecanismo que ayudará a paliar las consecuencias económicas que ha dejado la crisis sanitaria, pero también están quienes creen que se trata de una medida apresurada y poco responsable.
RioenLinea tomó contacto con algunos empresarios que se desempeñan en el rubro gastronómico de Valdivia, quienes expresaron sus opiniones respecto a la iniciativa.
“Sería una irresponsabilidad abrir”
Valeria Preller es Presidenta de la Asociación Barrio Comercial Gastronómico y Turístico Isla Teja, y dueña de “El Growler”, local ubicado en el sector Isla Teja de la capital de Los Ríos.
El recinto es uno de los tantos dedicados a la venta de comida y alcohol que han visto severamente mermados sus ingresos desde el inicio de la pandemia por COVID-19 en el país y que por estos días se han enfrentado a la decisión de reabrir o no sus puertas.
En conversación con RioenLinea y al ser consultada respecto a la medida anunciada por las autoridades, Valeria Preller expresó que “es una medida prematura. Me parece que el Gobierno ha estado actuando erráticamente, sobre la marcha. Creo que es un poco riesgoso todavía porque si no están bien adquiridos los hábitos de cuidarse en pandemia, con mayor razón se van a relajar al momento de la apertura de los locales”.
Así también comentó, desde su visión como dueña de un negocio del rubro, que las ansias de poder abrir son entendibles, pero que los riesgos son demasiado amplios. En este sentido, Preller expresó que “yo entiendo profundamente a la gente que quiere empezar a funcionar porque ha sido durísimo todo esto, pero por otra parte, en el caso de nuestro local, vamos a tener gente muy ordenada sentada al interior, pero a las afueras va a haber gente aglomerada para entrar y yo no puedo controlar lo que ocurra afuera. Sería una irresponsabilidad abrir”.
“Además, considerando el tamaño de nuestro local, el costo de la operación para tener un 25% de capacidad, la verdad es que no paga nada, sería solo seguir agrandando el gasto”, puntualizó la dueña de El Growler.
Finalmente, Preller aseguró sentir temor por las consecuencias negativas que el levantamiento de la medida de confinamiento pueda traer, asegurando que “yo creo que es súper arriesgada la apuesta, me da mucho miedo que esto pueda generar un rebrote. Por eso decidimos que no vamos a abrir, que la salud pública requiere un poco más de tiempo”.
Antonio Villalobos es Administrador del local “Bundor”, también ubicado en el sector Isla Teja de la ciudad y al igual que El Growler, han decidido no abrir las puertas del lugar para recibir nuevamente al público en el corto plazo. Durante este tiempo han estado funcionando bajo la modalidad delivery, una de los mecanismos de venta que se han estado implementando en este tipo de negocios con el fin de mantener dentro de lo posible sus ingresos.
Para Villalobos mantener cerrado el pub restaurant “es lo más sensato”, haciendo hincapié en los resultados obtenidos en otros países frente a este tipo de iniciativas. En este sentido, el administrador del recinto aseveró que “es una medida muy apresurada. Para nosotros sería irresponsable abrir dadas las condiciones a nivel nacional que estamos viviendo. Basta con ver las experiencias de otros país para saber que los rebrotes están a la vuelta de la esquina”. Esto, pese a que han observado entre un 60% y 70% de pérdidas en sus ingresos desde el inicio de la pandemia y el cierre del local para atención de público, según detalló el administrador.
“Nosotros queremos sacar lecciones de las experiencias de otros países y en ese sentido esto no nos garantiza seguridad para nuestro equipo ni para nuestros clientes”, concluyó Villalobos.
“Es una gota de oxígeno para seguir sobreviviendo”
Cristián Vásquez, dueño de la Sanguchería Kramm de Valdivia, confirmó que desde este lunes 13 de julio volverán a recibir público en su local ubicado en la zona centro de la ciudad.
Vásquez expresó que “hemos recibido la iniciativa de muy buena manera, ya que llevamos casi cuatro meses cerrados al público, vendiendo con delivery y retiro en local, lo que representa solo cerca del 10% de una venta normal”.
En este sentido agregó que “estamos casi quiebra y se nos abre esta ventana que es una gota de oxígeno para seguir sobreviviendo”.
El dueño de la tradicional Sanguchería detalló que han estado trabajando en tomar todos los resguardos y medidas necesarias para recibir a los cerca de 20 clientes de forma simultánea que la nueva modalidad les permitirá, por lo que se mantienen tranquilos frente a este nuevo desafío que, a su parecer, será útil para paliar los efectos de la crisis que han ido más allá de lo sanitario y que hoy los mantiene en números rojos.
“Si nos damos cuenta, los mall, las tiendas, las farmacias, están llenas de gente por todos lados. Yo no veo cuál es la diferencia. Solamente que la gente va a estar 10 o 15 minutos sentada en una mesa consumiendo”, aseguró.
Otro local que se dispone a abrir sus puertas, pero en las próximas semanas, es el café Cosas Ricas, que cuenta con dos sucursales en la zona centro de la capital de Los Ríos. Su propietara, Dominga Velásquez, comentó que han sido meses difíciles y que han debido reducir a su personal en cerca del 90%, por lo que la posibilidad de funcionar de forma reducida aún representa una esperanza de mejora.
Aunque Velásquez, quien confirmó que preparan la apertura de una de las dos sucursales del café mientras otro, dadas las condiciones de tamaño, pasará a convertirse en un emporio, dijo además considerar que el Gobierno, antes de dar a conocer la medida, debió hacer un trabajo de planificación y coordinación con los dueños de locales.
“Yo hubiese esperado que esta apertura se coordinara antes con los restaurantes o agrupaciones de turismo porque los requisitos y exigencias de la autoridad sanitaria para esta contingencia son bastantes. Hay que hacer inversiones y evaluar si es conveniente o no abrir. Esto debió ser más planificado”, aseguró la propietaria.
Así, agregó que “nosotros vamos a abrir, pero vamos a implementar todo un plan de apertura que implica capacitaciones y la implementación de protocolos necesarios para funcionar de acuerdo a la exigencia”, asegurando además que será importante evaluar la reacción del público frente a la apertura del recinto.
Sobre este último punto la dueña del café Cosas Ricas explicó que “eso está dividido. Hay personas que extrañan venir a tomarse un café y están esperando poder hacerlo pronto. Hay algunos que tienen hasta mesa reservada para cuando abramos, pero hay otros que dicen que todavía no es seguro, que puede ser un retroceso. Hay mucho temor en la gente”.
“Esto tiene que reactivarse sí o sí en algún momento. Es impensable que esto se alargue tanto más porque ya está siendo súper difícil”. Sin embargo agregó que “para que esto fuera más exitoso debió haber estado más coordinado, quizás con la autoridad sanitaria, la muncipalidad. No basta con haber entregado un protocolo porque aquí los locales son todos muy diversos y con realidades distintas”.
Consultada respecto a este tema, la Directora Regional del Sernatur, Paulina Steffen, comentó que sin duda “la industria del turismo en la región ha estado congelada y se ha visto sumamente afectada por la pandemia”, recordando también en ese sentido que hace unos días se realizó el lanzamiento del fondo concursable “Reactívate Turismo”, iniciativa que busca apoyar a los empresarios turísticos de la región con cerca de 740 millones de pesos.
Respecto a las preocupaciones que han manifestado quienes no van a abrir prontamente sus locales, Steffen aseveró que “es importante aclarar que no es una obligación abrir los restaurantes a partir del lunes. Lo más importante antes de la apertura es el proceso de preparación. Es importante conocer los protocolos y por supuesto que todo va a depender la de la realidad de las distintas empresas”.
Así, aseguró según lo que han podido observar desde el Sernatur, que hay algunos empresarios de la región que ya se habían estado preparando en meses anteriores para reimpulsar sus negocios y van a poder abrir este lunes con todas las normativas implementadas y deseosos de poder mejorar un poco la crítica situación que atraviesan.
Sin embargo, hay otros que van a seguir reforzando los protocolos de funcionamiento para retomar sus labores con atención de público cuando dichas medidas sean seguras para sus equipos y también sus clientes, esperando poder funcionar prontamente.