Ocho exmilitares son acusados por el asesinato de un conscripto de Valdivia en Dictadura
Contra ocho exmilitares se dictó acusación por su responsabilidad en el homicidio de un conscripto del Regimiento Cazadores de Valdivia, perpetrado durante los primeros meses de la Dictadura Cívico-Militar.
Luego de decidir procesar a los ex miembros del Ejército, el ministro en visita extraordinaria para causas por violaciones a los derechos humanos, Álvaro Mesa, acusó a Hernán Agustín Rodriguez Leyton, Víctor Hugo Hermosilla Reinoso, Luis Edmundo Riveros Soto, Ernesto Alejandro Flores Colimán, Rigoberto Becerra Fica, Waldo Eugenio Salinas Núñez, René Miguel Sáez Gómez y H.W.C.R. en calidad de autores del delito de homicidio calificado, en carácter de lesa humanidad.
Dicho ilícito fue cometido contra el joven de 18 años José Gastón Buchhorsts Fernández, quien cumplía su servicio militar en el Regimiento Cazadores de Valdivia y fue asesinado entre septiembre y noviembre de 1973.
Según los antecedentes acusatorios expuestos por el ministro Mesa, la víctima fue considerado desertor al no regresar a la unidad militar tras una ausencia autorizada, motivo por el cual fue detenido en Villarrica, para posteriormente ser trasladado hasta Valdivia.
Tras informar de la supuesta presencia de armamento, el conscripto retornó a la comuna donde fue aprehendido junto a una unidad militar para iniciar el operativo de búsqueda, no obstante, luego de no encontrar nada, se ordenó ejecutar a Buchhorst en los faldeos del volcán Villarrica, siendo enterrado en ese mismo lugar.
Al no saber el paradero de su hijo, el padre de la víctima acudió hasta el Regimiento Cazadores de Valdivia para obtener información, desde donde le dieron respuestas evasivas, erróneas o ambiguos e, incluso, le habrían mencionado que estaba en otro recinto militar de la capital regional.
Ante esto, los familiares acudieron a un fiscal militar, quien les comunicó que el joven fue llevado hasta el sector donde se cometió el delito, pero al momento de escapar, se le habría aplicado la Ley de Fuga, asesinándolo y sepultándolo en dicho sitio, negándoles información sobre la ubicación y no permitiéndoles buscar el cuerpo.
Por último, según lo planteado por el ministro Mesa, ninguno de los exmilitares ha entregado más información respecto a estos hechos.